Han pasado pocas semanas desde que mis padres se
fueron todos los días con Alisson hablábamos, ella es perfecta… simplemente
perfecta. Miraba como esa chica tan hermosa, Alisson, observaba las pautas de
música, que yo había compuesto, eran melodías románticas, me acerque a ella, y
le dije:
— ¿Te gusta la música?— le dije al oído, ella se
dio vuelta, quedando a centímetros de mi cara, pero como yo era un caballero, y
era la primera impresión no podía besarla, no aun, así que retrocedí un paso.
— sí, amo toda la música romántica.
— ¿en serio? A mí también me gusta mucho— dije con
un poco de vergüenza, ya que aquí, a los hombres que les gusta la música
romántica, los consideran, bueno… pues… eso… homosexuales
— Pero ¿no eres del otro bando verdad?— dijo
mirándome extrañada.
— no, claro que no— dije exaltado.
— ah que bien, ya me había asustado.
— ¿Por qué?
— pues porque un chico tan lindo como tú— dijo
acercándose a mí— no le deberían gustar los hombres.
— eh, no te preocupes, no me gustan— dije retrocediendo
un paso más
— Qué bueno— dijo acercándose otro paso más, iba a
retroceder, pero choque con el piano, ¡claro el piano!
— ¿Eh quieres que te toque algo?— dije nervioso
— ¿Tocarme algo como qué?— dijo enrollando un
mechón de su pelo, en su dedo y mordiéndose el labio, por Dios que mal pensada.
— algo del piano.
— Claro que del piano— dijo riendo— no crees que
soy tan pervertida ¿o sí?
— Eh no claro que no— mis manos están sudando—
bien siéntate, y escucha una nueva canción que compuse.
— Ok— dijo sentándose en el sofá.
Comencé a tocar una canción que había titulado For You, cuando tocaba me ponía a dejar mi mente vagar, me puse a pensar,
en la linda chica que escuchaba la melodía tan armoniosa, me puse a pensar
¿Cómo sería tener una vida al lado de esa hermosa señorita? Cortejarla, robarle
uno que otro beso, pedirle que fuera mi novia, pasar tiempo juntos, andar con
ella por un carruaje, pedir su mano en matrimonio a su padre, casarnos, tener
hijos, una parejita, sí un niño Anthony y una hermosa niña Elissabet, sí ese
nombre es muy lindo, me gustaría ver cómo crecen, celar a mi niña, espantar a
todos sus pretendientes, y finalmente estar en una casa grande con mi esposa
envejeciendo a un lado, y con nuestros nietos corriendo de aquí para allá,
mirar a Alisson a los ojos y darme cuenta que ha sido una hermosa vida, feliz y
llena de bendiciones. Mientras pensaba siento una presencia a mi lado, miro y
está ella, Alisson sentada a mi lado observándome, miro sus ojos, azules como
el mar, su lindo cabello que está recogido, deja caer uno que otro mechón y
encuadra su hermosa y delicada cara, comienzo a tocar más apasionadamente,
pensando en todo lo que podría pasar con una vida al lado de esta preciosa y
delicada señorita.
— tocas hermoso
— es porque estoy inspirado.
— ¿piensas en alguien?
— Probablemente— dije sonriéndole de lado
— Qué suerte la de esa chica— dijo sonriéndome de
la misma manera.
— ¿Qué te parece si nos conocemos un poco?
— Claro, ven— dijo guiándome al patio.
Nos sentamos en una banca, se escuchaba el canto
de las aves, y el aire era puro, el clima estaba muy lindo, había un sol espléndido,
y yo estaba con la chica más hermosa del universo.
— bien, mira para que sea más divertido, haremos
10 preguntas, ¿bueno?
— ok
— primera pregunta: ¿Cuántos años tienes?
— 18 ¿y tú?
— no, no, no y no, las preguntas las hago yo,
tienes que esperar tu turno
— jajajaja ok, pero luego no te quejes por las
preguntas que te haré
— ¿ok?
— ok, vamos sigue preguntando
— bien, ¿Por qué vinieron a Londres?
— Porque… quedamos huérfanos, y en el testamento
de mi padre, decía que tu padre, era un amigo de su infancia y de confianza,
que él nos acogería en su casa— dijo poniéndose triste, hay no estúpido Edward,
¿Por qué le preguntaste?
— perdón, no quería hacerte llorar.
Ella solo se acurruco en mi pecho y comenzó a
llorar, yo no sabía cómo reaccionar, solo la abrace, acaricie su cabello y
comencé a decirle que todo estaría bien, que se tranquilizara, ella levanto la
cabeza, y vi como claras gotas de agua, o mejor dicho lágrimas, caen de sus
hermosos ojos azules, las limpio con mis dedos, y nos empezamos a acercar,
estamos a un centímetro de juntar nuestros labios…
— Alisson— dice una voz a nuestra espalda.
Nos separamos rápidamente, ella se limpia los
ojos, y queda tan perfecta como antes, nos damos la vuelta, para ver quién nos
ha interrumpido, y al verlo, empiezo a odiarlo inmediatamente…
— ¿Paso algo hermanito?— dijo mirando a Fernando,
idiota tenía que interrumpirnos ahora.
— no, es solo que la comida ya está lista, ¿vamos
a sentarnos?
— no, estoy algo cansada, creo que me iré a
recostar
— bueno, ¿Edward vienes?
— si vamos
Nos dirigimos al comedor, y Alisson a su
habitación, me dio tristeza verla así, miré a Ana y estaba muy a gusto
conversando con ese tal Fernando, lo admito no me agrado además de que me puso
celoso, la mesa estaba triste, bueno… solo éramos Taylor, Ana, Fernando y yo,
así que me disculpe y Salí al jardín, al rato veo que Taylor se sienta a mi
lado.
— hola hermano ¿Qué haces?
— aquí pensando
— ¿en qué?
—en… tonterías
— ¿cómo crees que estén los abuelos?
—espero que mejoren… no quiero perderlos
— ni yo
~ Narradora
Han pasado 3 años, en un principio Edward y Taylor
eran muy unidos, pero con la llegada de Alisson, se vuelven enemigos en cierto
modo, ya que ambos se sienten muy enamorados por la belleza de Alisson, lo que
los convierte en enemigos por su amor, pero lo que no saben es que ella posee
tal belleza porque es una chica inmortal, al igual que su hermano, pero hay una
clara diferencia entre ambos hermanos, Alisson con su apariencia de ángel,
enamora a cualquier chico, y su plan es convertir a los Lowell en vampiros,
porque ambos poseen poderes que son muy importantes, Edward el de leer mentes,
y Taylor el de manipular la mente, además de uno extra que solo poseen los 3
hermanos Lowell, el de hipnotizar inmortales, y humanos, su plan es
convertirlos, convencerlos de que la ayuden, y al final matarlos, pero algo
impedirá su “plan perfecto”. Oh casi lo olvidaba luego de que los padres de los
chicos, viajaran a casa de sus abuelos, estuvieron como mes y medio por allá,
el abuelo estaba mejorando, pero un día los padres tuvieron que acompañar a la
abuela a hacer unos trámites, y cuando volvieron, vieron que el abuelo estaba
muerto, la policía estuvo investigando, pero, dijeron que habían entrado a
robar y lo habían matado, una terrible mentira ya que fue Alisson, si la linda
chica con cara de ángel, que tiene cautivados a Edward y Taylor, esa misma fue
la que ataco al abuelo de los Lowell.
Ya habían pasado 4 meses desde esa desagradable
noticia, los chicos se lo tomaron muy mal, en especial Taylor, que los quería
muchísimo, fue el que más sufrió; ya estaban en Enero de 1849 y los chicos no
paraban de cortejar a Alisson, que si tenía oportunidad les coqueteaba, a
ambos, eso en el fondo le dolía a Edward, pero Alisson ya le había dejado en
claro que no quería nada serio. Un día de enero, Alisson le dijo a Edward que
tenía que hablar algo importante, él no entendió, de que quería que hablaran…
*Flashback*
— ¿Y bien de qué quieres hablar amor?— dijo
tomándola de la mano
— tú sabes que yo te amo ¿verdad?
— sí, aunque yo te amo más— dijo el chico con la
esperanza que ella le contestara lo
mismo, lástima que ella no pensaba decirle algo cursi.
— bien pues necesito contarte algo, es un secreto.
— ¿en serio me quieres contar un secreto?
— si, después de todo, confío en que no le dirás a
nadie.
— Claro que no le diré a nadie— dijo un poco
ofendido— mis labios están sellados.
— bien, espero no te molestes, por lo que te diré,
Edward soy vampira— dijo la rubia.
— ¿Qué?— dijo el chico un poco asustado, ¿a quién
engaño? estaba muy asustado.
— Calma Edward, quiero que te lo tomes con
tranquilidad— ella lo hipnotizo, sí su don era hipnotizar humanos.
Bueno después de eso, Edward estaba muy intrigado
en el tema, y quiso saber más acerca de los vampiros. Pero sería una historia
distinta con Taylor…
— amor, tengo que contarte algo— dijo la rubia
jugando con sus manos.
— ¿Qué pasa cariño?— dijo el morocho preocupado.
— es que, soy un vampiro— si le fue más fácil
decirle a Taylor que a Edward.
— ¿Qué?— dijo exaltado.
— Lo que oíste— dijo ella mirándolo con ternura.
— Pero mi padre y mi familia son cazadores de
vampiros— dijo agarrándose la cabeza.
— si lo sé,
por eso no se lo puedes decir a nadie.
— ¿me estás diciendo que les esconda la verdad a
mis padres?
— Tienes que hacerlo… por mí— dijo ella mirándolo
a los ojos, ella sabía que era su arma más poderosa, Taylor nunca se podría
resistir a esos ojos color mar.
— ¿Alguien más lo sabe?— dijo sentándose y
calmándose, sí la víbora había ganado de nuevo.
— tú, Edward y yo.
— ¿y estás seguro que Edward no le dirá nada a
nadie?
— Muy segura— dijo ella, y le dio un beso puro en
los labios al chico que se había enamorado de ella.
*Fin Del Flashback*
El tiempo fue pasando, Taylor y Edward se odiaban
más, todo por culpa de Alisson que hacía que ellos se enfrentaran, a Edward le
decía que lo amaba solo a él que Taylor la buscaba y eso hacía que Edward, que
era muy celoso, se enojara y peleara con Taylor, por otro lado Alisson le decía
a Taylor, que Edward era brusco con ella, que siempre que podía la lastimaba,
cosa que no era verdad, ya que Edward siempre era muy tierno con ella, le
compraba flores, le cantaba y le componía canciones, hasta trataba de peinar su
alocada cabellera por ella, pero Taylor conocía una realidad muy distinta. Ellos
le pedían una y otra vez a Alisson que los convirtiera en vampiros, pero ella
les decía que cuando fuera el momento indicado los convertiría, a propósito no
les conté como Alisson mato a los padres de los Lowell. Taylor y Alisson ya se
habían demostrado su mutuo amor, ella lo sedujo como la serpiente que era, y
como el chico no era de fierro, no dudo en caer rendido a sus pies. Pero con Edward…
— amor, necesito que me digas algo.
— Claro cariño lo que sea— dijo el chico mientras
caminaban por el jardín de la casa Lowell.
— ¿Tú me amas?— dijo ella parando en seco.
— por supuesto, ¿Por qué lo preguntas?
— porque no me has tocado nunca, ¿acaso no me
deseas?
— Alisson… amor… si te deseo, pero yo… yo soy…
— ¿Edward tú eres casto?— dijo la chica gritando
— Cállate— dijo tapándole la boca con la mano,
mirando a todos lados, para ver si no la habían escuchado.
— perdón pero en serio me sorprendes.
— ¿Por qué?— dijo el chico curioso
— Porque eres muy lindo, yo hubiera caído a tus
pies hace mucho— dijo acariciando el cabello del chico— vamos a tu cuarto— le
dijo susurrándole en el oído, lo que hizo que el muchacho se estremeciera.
— Claro— dijo siguiéndola como perrito faldero.
Los chicos subieron a la habitación, Ana andaba de
paseo con Fernando, que se llevaban de maravilla, Taylor fue a comprar unas
cosas para Alisson, y sus padres andaban en casa de unos amigos, así que tenían
la casa para ellos solos…Alisson como era más experimentada, lo lanzó a la
cama, y Edward quedo ahí sentado, observando, Alisson comenzó lentamente a
sacarse el vestido en forma sensual frente a Edward, y él estaba boquiabierto,
cuando ya no había vestido, se sacó el corsé, y bajo el corsé tenía una
perfecta figura, con la que Edward quedo enloquecido, ella quedo solo en ropa
interior, y se lanzó sobre el chico que aun asustado y emocionado, no tardó en
responder, comenzó a besarla lentamente, ella comenzó a desabrochar su camisa,
y dejo un camino de besos húmedos en el pecho de Edward, él solo quería tenerla
en sus brazos, ella le dijo al oído:
— no se vale.
— ¿Qué cosa?— dijo mirándola.
— Yo estoy en ropa interior y tú solo te has
sacado la camisa— el chico sonrió.
Alisson le ayudó a sacarse sus pantalones, él
estaba muy nervioso, ella lo tiro encima de sí misma, y comenzaron a besarse
apasionadamente, él le saco el brasier, y besaba sus pechos dulcemente y ella
enredaba sus manos en el cabello del chico, sus besos bajaban y subían por su
abdomen, ella le comenzó a bajar el bóxer, mientras él le besaba el cuello,
ella se sacó las bragas, y quedaron los dos sin nada, ella quedo debajo de él,
y él se posiciono para el momento final, cuando estaban a punto de hacerlo,
abrieron la puerta de golpe.
— Aléjate de ella Edward— dijo Clark el padre de
los chicos.
Los chicos se apresuraron, en taparse, Edward con
una almohada y Alisson con las sabanas.
— ¿papá que haces aquí?
— aléjate de ella Edward.
— ¿Por qué?— dijo el chico confundido
— Edward, sé que sabes que ella es un vampiro—
dijo mirándola con desdén.
— papá yo la amo— dijo el chico, con lágrimas en
los ojos.
— ¡JA! ¿Y tú crees que ella te ama?
— no lo escuches cariño, nos quiere separar.
Edward no sabía que pensar, por un lado estaba la
que él creía el amor de su vida, a la que amaba profundamente, y por otro
estaba su padre, que no tenía para que mentirle, pero siguió su corazón como
todo enamorado, y eso fue una muy mala decisión…
— Ya basta papá, deja de mentir, ella me ama, y yo
la amo a ella— dijo poniéndose delante de ella para que no le hiciera daño.
— Deja de decir estupideces Edward, y apártate—
dijo su padre apuntando una arma con estacas.
— Si la matas a ella, me tendrás que matar a mi
primero— dijo protegiéndola, ella sonreía por dentro, eso era lo que quería,
una pelea entre padre e hijo, y lo estaba consiguiendo.
— Edward hijo, no hagas esto por favor— dijo el
padre agobiado, no quería matar a su hijo.
— ¿hacer qué? ¿Defender a la chica que amo? ¿Acaso
tú no harías lo mismo?
— Edward apártate, no quiero hacerte daño— dijo
apuntando el arma
— NO, si la matas a ella será sobre mi cadáver.
— no me lo perdonare nunca, pero tú elegiste— dijo
su padre y disparo la estaca.
Edward ya no tenía miedo, quería defender a la
chica que amaba, y si eso significaba morir lo haría, solo unos segundos y
sentiría la sangre correr fuera de su cuerpo, cerró los ojos y espero, pero no pasó
nada, abrió los ojos y vio a Fernando que recibía la estaca por él, y caía
desvanecido frente a sus ojos. Alisson rápidamente corrió a ver a su hermano,
mientras Edward le quitaba el arma a su padre, que estaba muy sorprendido, no
sabía que Fernando también fuera un vampiro, o un chupasangre como él decía.
— Hermanito, hermanito— decía Alisson moviéndolo
con lágrimas en los ojos.
— Alisson… te dije que… no les… hicieras daño…—
decía el chico apenas, la estaca le dio en el corazón.
— está bien, me voy pero ándate conmigo, no me
abandones, eres lo único que me queda— decía la rubia por primera vez débil.
— te… quiero— dijo el chico cerrando los ojos para
siempre.
— no hermano despierta— decía moviéndolo
fuertemente— vamos Fernando no te vayas— dijo la chica angustiada— ¡DESPIERTA!—
dijo golpeándolo, pero ya nada se podía hacer, él ya se había ido— TÚ maldito
viejo, tienes la culpa de todo— dijo refiriéndose al padre de los chicos— por
tú culpa mi hermano murió— dijo la chica levantándose y mirándolo con odio—
quiero que te entierres ésta estaca, una y otra vez en tu pecho— dijo
hipnotizándolo.
— NUNCA— dijo el padre.
En eso llegaron todos, la madre, Taylor y Ana que
corrió a ver a Fernando, que ya se había descompuesto el color de su cara, ella
no sabía de la existencia de los vampiros hasta ahora, vio la estaca, a Alisson,
a Edward triste y a su padre que se enfrentaba a la víbora de Alisson.
— amor ¿Qué sucede aquí?— dijo la madre
preocupada.
— te dije que era una vampira, ha enamorado a
Taylor y a Edward, y cuando la iba a matar, su hermano que también era vampiro
se cruzó y le clave la estaca a él por accidente, bueno igual lo mataría
después.
— ¡Matate ahora!— le gritó Alisson
— NO, tengo esto— dijo mostrándole un collar con
verbena.
— y eso a mí que me importa— dijo la rubia
tomándolo y tirándolo lejos.
— ¿pero… cómo? Te deberías haber quemado tiene hiedra— dijo el padre ahora asustado.
— he vivido la mayor parte de mi vida vampírica
tomando ésa porquería ahora soy inmune— dijo acercándose.
— Eres una maldita, ¿Por qué no le dices a mis
hijos que no los amas, y nos dejas en paz?— dijo enojado pero aun asustado.
— los dejare en paz no te preocupes— y se lanzó al
cuello del padre.
Comenzó a beber toda la sangre del padre, frente a
todos, Edward, Taylor, Ana y su madre que miraba horrorizada la escena, Ana
quería ir a quitarla de encima, pero Edward la afirmaba, Taylor no sabía qué
hacer, así que se quedó ahí, mirando como su padre perdía el color, por su
enamorada. Cuando termino de beber toda la sangre, su ojos estaban negros, miro
a la madre de los chicos que tenía una estaca en la mano en modo de defensa,
ella se la clavo, pero en el estómago, Alisson sonrió se la saco y se le tiro
al cuello también, los chicos no hacían nada, miraban la escena, la única que
sufría era Ana, pero no la dejaban acercarse. Cuando termino de beber la sangre
les dijo a los chicos:
— Al fin solos, ya nadie nos podrá separar— dijo
sonriendo con la boca manchada de sangre— llévense los cuerpos y entiérrenlos.
— ¿el de tu hermano también?
— TODOS— dijo y se fue a su habitación.
Los chicos se llevaron los cuerpos y Ana quedo
allí llorando desolada, ya no tenía a nadie en el mundo, además de los títeres
de Alisson, porque ya no eran sus hermanos. El tiempo pasó, lento y doloroso,
para Ana la tortura de ver a la asesina de sus padres y a los imbéciles de sus
hermanos embobados no hacer nada… la mataba lentamente
cogiste la idea de vampire diaries cuando katerina enamoro a stefan y damon
ResponderBorrareh..... bueno sí, pero la historia en sí es muy distinta a Vampire Diaries
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