...1850...
— Eddie tu hermana es una entrometida, deberíamos
matarla, y así no se interpondrá entre nosotros
— Alisson, amor, no me digas “Eddie”, y sobre lo
de Ana, tienes razón, es una entrometida, solo quiere decirnos a Taylor y a mí
lo que hacer ¿verdad Taylor?
— mmm no sé, es nuestra hermana, y yo la quiero,
no podría matarla y mucho menos dejarla seca.
— vamos Tay, sé que la quieren después de todo es
su hermana— dice haciendo un gesto de desagrado— pero ¿tú me amas?
— claro, por supuesto que te amo
— ¿entonces?, hay que sacarla del camino.
— yo creo que Alisson tiene razón, Ana molesta mucho
— no lo sé
— Taylor, hay que matar a Ana, así estaremos
juntos por siempre— Alisson miro directamente a los ojos, hipnotizándolo
— Hay que matar a Ana, y así estaremos juntos por
siempre.
— y para que vean que no miento— se muerde la
muñeca, comienza a salir sangre, y le da de beber a Edward.
—Mmm esta deliciosa, quiero más— decía ansioso.
Luego Alisson le da a Taylor.
—No muy seguro— ¿está bien que hagamos esto?
— si hazme caso, está bien bebe— Taylor comienza a
beber la sangre de Alisson y para mal de su hermana… al chico le gustó.
— ¿y ahora qué?
— Esto— les quiebra el cuello a ambos.
— ¿Qué les hiciste a mis hermanos? Maldita perra—
le decía Ana corriendo a un lado de los cuerpos muertos de sus hermanos, ella
había escuchado detrás de la puerta todo lo que estaba pasando
— mmm déjame pensar, oh si, les di la vida eterna,
ahora estaremos junto por siempre, cuando despierten te mataran y viviremos
libres de ti— Taylor y Edward comienzan a despertar y sienten un ardor en la
garganta.
— ¿Qué paso?, ¿Por qué me duele todo?, ¿Por qué
tengo tanta sed?
— ¿Edward?
— ¿sí?
— somos vampiros
— ¿De verdad?— decía muy feliz
— si amor,
ves te dije que no les mentía, ahora beban la sangre de su hermana y…— fue
interrumpida por Taylor.
— Ella también se convertirá en vampira ¿verdad?—
decía Taylor esperanzado, Edward y Alisson ríen al mismo tiempo
— Que gracioso hermanito, pero ella— dijo mirando
a Ana— será nuestra comida— decía lamiéndose los labios.
— pero… Edward… soy su hermana… no pueden matarme.
— hay niñita, eso ya no les importa ahora, solo
quieren comer y tú eres lo más cercano a comida que tienen, Edward Taylor
ataquen a Ana, pero dejen un poco para mí, quiero terminar de matarla— decía
con una sonrisa victoriosa. Edward y Taylor comienzan a acercarse
peligrosamente a Ana
— un paso más Edward y te mato— decía Taylor con
un pedazo de madera en la mano
— ¿pero qué estás haciendo Taylor?, yo te
hipnotice debería matarla.
— Que poco observadora Alisson, tenía Hiedra en la
mano, ¿Cómo no te diste cuenta?— decía Taylor en posición defensiva.
— Taylor mátala, su sangre debe ser deliciosa—
decía Alisson tentando a Taylor.
— nunca le haría daño, y menos dejaría que ustedes
la tocaran, Alisson eres la mujer que más amo, pero ella es mi hermana y si me
tengo que enfrentar a ti por ella, lo haré y Edward ¿Cómo no recuerdas todos
los momentos que pasamos juntos?— Edward comienza a recapacitar y se da cuenta
que matar a su hermana es el peor error de su vida.
— Taylor tiene razón, Ana es nuestra hermana y
juramos que estaríamos juntos por siempre.
— ajá si como no, que dramáticos, pero bueno tengo
hambre y si ustedes no la mataran la matare yo.
Alisson se abalanzo sobre Ana, pero Edward la empuja
lejos comienzan a luchar, pero Alisson por ser una vampiresa hace más tiempo
empujó a Edward lejos y fue en busca de Ana para matarla, Taylor se interpuso
entre su hermana y Alisson, pero lo único que logra es aumentar la furia de
ésta, ella lo empuja lejos y va directo al cuello de Ana, la muerde y comienza
a beber su sangre, pero Taylor y Edward la sacaron de encima de su hermana
haciendo que ésta salga por la ventana cayendo lejos
— esto no se quedara así malditos Lowell, al menos
sufrirán porque su estúpida hermanita morirá— ríe malvadamente— me vengare de
ustedes lo juro— dijo ella corriendo lejos de ahí. Taylor y Edward lloraban
porque su hermana estaba agonizando
—chicos… gracias… por tr…atrar de… salvarme…
perdón por haberlos mandado tanto, y por… todas las… rabietas que hice.
— si es por lo que escuchaste cuando hablábamos
con Alisson es…
—No Edward no digas que es mentira, yo te vi, vi
en tus ojos… odio— decía sufriendo.
— Ana no hables todo saldrá bien, cálmate— decía
Taylor llorando
— ¿Qué estás diciendo Taylor?— decía furioso y
gritando— ¿cómo va a salir todo bien? Nuestra hermana está a punto de morir, Alisson
juro venganza, somos vampiros y ni siquiera sabemos cómo controlarnos o que
hacer para no sentir tanta hambre.
— todo esto es tú culpa, y solo tuya— decía Taylor
aún más furioso.
— ¿mía?
— sí, tuya, si no me hubieras obligado a ser
vampiro esto no habría pasado— decía Taylor muy arrepentido de ser vampiro.
—chicos… ya paren… por favor… no discutan.
— Si te hubiéramos hecho caso esto no hubiera
pasado, perdón Ana, perdón— decía llorando y muy agobiado.
Ambos hermanos lloran muy arrepentidos, y Ana poco
a poco comienza a cerrar los ojos hasta que ya no respira.
— ¿¡Ana!?— dicen ambos al mismo tiempo
— Ana despierta cariño, vamos te necesito aquí
conmigo, tu eres mi pequeña hermanita no te vayas, ¡no!
— Por favor Dios que funcione que funcione— decía
Taylor rezando para que funcionara.
Taylor y Edward se quedan dormidos a un lado del
cuerpo de su hermana muerta, llorando, estaban muy cansados, y poco a poco se
quedaron dormidos. La noche fue dolorosa, solo quedaban ellos dos… y ni
siquiera sabían cómo ser vampiros, Taylor comienza a despertar y queda muy
asustado con lo que ve.
— ¿Ana?, Edward despierta.
— déjame en paz, ya nada tiene sentido.
— Edward vamos despierta— mueve a Edward fuerte—
Ana no está.
— ¿¡que!? ¿Cómo que no está? Eso es imposible—
dice despertando de golpe
— ehm… bueno lo que paso fue que antes de que
muriera Ana, mientras tu luchabas con Alisson, yo le di de beber mi sangre a
Ana, y pues parece que también se convirtió
— ¿Cómo que le diste de tu sangre?, estabas muy
débil ¿Cómo resististe?
— por ella sería capaz de cualquier cosa, la
quiero más que nada en el mundo ustedes son mi única familia desde que Alisson
mato a nuestros padres.
— ¿Y porque no me dijiste nada?— decía con una
mezcla de feliz y enojado.
— Pues…— Cuando le iba a contestar escucharon un
ruido en el primero piso— debe ser Ana— dijo muy feliz.
— Bajemos a ver —tomando del brazo a Taylor— pero
esta conversación la terminaremos
— sí, ajá como digas, luego lo hablamos, ¿podemos
ir a ver si es Ana?
— Si vamos, apúrate— decía corriendo.
Los chicos al bajar
quedaron paralizados por lo que veían, era Ana y tenía muchos cuerpos a su
alrededor
— ¿Edward estas bien?
¿Qué le paso a tu cara?— dijo Taylor espantando al ver la cara de Edward
— si estoy bien, de
hecho más que bien, pero ¿porque dices si me paso algo en la cara?
— Edward…— dijo el
morocho poniendo un espejo en frente de Edward— estas horrible.
— ¡MI CARA! ¿Qué le
paso a mi cara?, este no soy yo, yo soy guapo, esto parece un monstruo, Taylor
dime que no soy yo por favor— Edward tenía los ojos completamente negros
— lo siento pero eres
tú…
— ¡hey chicos! No
sabía que estaban ahí, vengan comparto con ustedes— dijo Ana cuando vio a los
chicos parados a un lado de la escalera
— ¿Ana que me pasa?
¿Por qué tengo la cara así?— preguntaba Edward asustado
— hay Edward no seas
dramático hermanito, eso es porque hueles sangre, yo pase por lo mismo, y Taylor
está pasando por lo mismo— dijo riéndose
— ¡no! ¿Cómo puedo
volver a la normalidad?— decía desesperado el morocho
— debes beber sangre.
— ¿¡Qué!? No, claro
que no beberé sangre, por lo menos no humana.
— ¿Seguro? esta
deliciosa— decía Edward bebiendo lo que quedaba de sangre en los cuerpos.
— si seguro, solo
beberé sangre animal.
— como digas, más
para nosotros— decía riéndose Ana junto con Edward.
— No vas a resistir— decía
Edward bromeando.
— claro que si
resistiré— Taylor estaba inseguro, ¿Cómo resistirse a algo que es de tu
naturaleza?
— ok, entonces
seremos 2 carnívoros y un vegetariano— dijo Ana refiriéndose a Edward como el
carnívoro y a Taylor como el vegetariano
— claro, seré
vegetariano, iré a cazar algún animal y luego me cuentas todo lo que necesitamos
saber.
— Bueno nos vemos— dijo
Ana lanzándole un beso
— adiós Ana y adiós
bestia.
— adiós animal.
— no cambian— dijo
Ana poniendo los ojos en blanco
Mientras Taylor iba a cazar animales, Edward y Ana comían sangre de los muertos que habían, luego de media hora Taylor que estaba totalmente satisfecho vuelve a casa
Mientras Taylor iba a cazar animales, Edward y Ana comían sangre de los muertos que habían, luego de media hora Taylor que estaba totalmente satisfecho vuelve a casa
— chicos ya llegué—
— ok Taylor, ven aquí
estamos— decía Ana gritando desde la cocina.
— ¿y? ¿Qué tal estuvo
el gato?
— Hey ya déjalo, no
ves que se comió una manada entera de osos, su aliento apesta— decía Ana moviendo
su mano como si algo apestara.
— ¡mentira! Solo fue
la mitad de la manada— dijo Taylor riéndose junto con los chicos
— Bueno ahora que
estamos todos les cuento, recuerdan que Alisson tenía un “don”— decía haciendo
comillas.
— ¿Sí?— dijeron los
chicos al unísono
— ¡adivinen!
— Ya dinos, nos
tienes intrigados— decía Edward desesperado
— Puedo ver el futuro—
Taylor y Edward se miran entre si y quedan en shock sin saber que decir.
— ¿Qué? ¿Cómo que
puedes ver el futuro? — dijo Edward
— ¿Qué don tenemos
nosotros?— preguntó ansioso Taylor
— ¿Son tan geniales
como los tuyos?— dijeron Taylor y Edward al mismo tiempo
— ¡hey chicos!, que
pasa porque no me dicen nada— decía Taylor al ver que nadie hablaba, Ana había
cerrado sus ojos y Edward tenía un tonta sonrisa— ¿y…? ¿Qué pasa?
— Leo las mentes—
decía Edward feliz, casi saltando de
alegría.
— pareces un bebé…
¿Qué puedes leer mentes??— dije sorprendido.
— ¡Si!— decía
haciendo un baile muy ridículo.
— ¿y yo?
— ¿tú qué?
— ¿Qué don tengo yo?—
dijo Taylor ansioso. Edward miro a Ana y Ana miró a Taylor
— Taylor tu don es
grandioso…
— No tanto como el
mío— dijo Edward muy engreído.
— No me interrumpas—
le dijo golpeándolo suavemente en el hombro.
— ok, ya dile al niño
lo que quiere saber —dijo burlándose.
— Taylor, puedes manipular
las mentes— dijo gritando, casi quedo sordo.
— ¿y eso cómo
funciona?
—tú solo pones una
imagen mental en la cabeza de alguien, y esa persona verá lo que tú quieres ver
—Asombroso— decía
Taylor riendo
— Ahora vamos a
aprender a controlarnos— dijo Ana y los chicos la siguieron al patio trasero
Luego de estar
practicando toda la tarde, de correr, regenerarse y usar sus dones… se fueron a
descansar.
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